Los taxistas de Rosario se presentaron este lunes ante la omisión de Servicios Públicos del Concejo Municipal, solicitando un aumento del 50% en la tarifa de sus servicios. Argumentan un desfasaje del 130% respecto a los costos operativos actuales y rechazan la propuesta de implementar una «tarifa variable».
La Municipalidad propuso que los servicios de taxi se puedan ofrecer un 20% más caro o barato dependiendo la demanda del momento.
Ezequiel Lovey, representante de la Asociación Unidos por el Taxi, expresó su descontento en diálogo con Cadena 3 Rosario: «No estamos de acuerdo con el 20 por ciento por viaje. Imagínense que si yo hago un viaje de 6.000 pesos tengo que dejar el 20 por ciento. No me llevo nada. O sea, yo trabajo por el 40 por ciento menos el 20 por ciento. No laburo por nada. Esto es llevarnos a la destrucción».
Por su parte, Cristina D’Amato perteneciente a Catamtir (Cámara de Titulares Mixta), compartió su preocupación ante la difícil situación económica y los cambios propuestos: «No puedo más, voy a tener que entregar mi chapa porque no tengo ninguna manera de poder seguir». Explicó también que ha tenido dificultades para mantener su taxi y cumplir con las regulaciones municipales debido al impacto económico.
Impacto de la competencia y la oferta y demanda
Los taxistas señalan que hay alrededor de 5.000 coches ilegales circulando en la ciudad, comparado con los 3.500 taxis legales. Este fenómeno, según ellos, hace inviable trabajar bajo un sistema de oferta y demanda.
La competencia con aplicaciones de transporte también ha afectado significativamente a los taxistas. Mencionan que las aplicaciones no solo cobran una comisión del 15% por viaje, sino que también socavan la tarifa regulada del taxi.