Mientras la Justicia tiene en sus manos hacer lugar al amparo presentado por abogados rosarinos para que la aplicación Uber deje de funcionar de manera ilegal en Rosario, la edil radical Anahí Schibelbein convocó este miércoles a una reunión en el Concejo para seguir buscando soluciones a la avanzada de la empresa en la ciudad.
Del encuentro participaron actores de diferentes ámbitos, todos comprometidos con la causa, como el titular del ente de la movilidad Ezequiel Escobar, el abogado que presentó hace más de dos años el amparo, Federico Fernández, así como representantes de la Cámara de mujeres taxistas, de peones, choferes, e incluso del sindicato.
Controles insuficientes y laxos, falta de pronunciamiento explícito de parte del Ejecutivo municipal, y por supuesto las dilaciones en la Justicia se anotan como los principales reclamos que desde el sector taxista vienen repitiendo insistentemente.
“Creemos que de parte del Estado local ha habido demostraciones de querer resolver el problema y prueba de ello es que hay una mesa conformada con el secretario de control urbano y taxistas para ir diagramando controles y que sean efectivos. Ahora planteamos que incluyan a representantes del Concejo para ver si podemos colaborar también desde nuestro ámbito con alguna legislación que colabore en hacerle frente a este sistema ilegal que significa una competencia desleal para los taxistas”, apuntó Schibelbein tras el encuentro.
La edil pullarista también sostuvo que es necesario reconocer que el sector ha perdido la batalla cultural en la sociedad por diferentes cuestiones y eso hizo que hoy mucha gente se vuelque al servicio ilegal de Uber. “Hay que hacer los esfuerzos necesarios para que no se pierdan las fuentes de trabajo pero reconociendo que hay ciertas dificultades propias del sector que se tienen que resolver también”, planteó.