Docentes nucleados en Amsafé y Sadop, además de asistentes escolares, encabezaron este martes un paro total de actividades en reclamo de medidas de seguridad, en virtud del recrudecimiento de la violencia en las escuelas de Rosario. La convocatoria partió a las 10 desde Plaza 25 de Mayo y marchó hasta Plaza San Martín, donde se realizó un multitudinario acto.
“Cada semana nos encontramos con hechos más graves”, lamentó Juan Pablo Casiello, secretario general de Amsafé Rosario, quien puntualizó en la balacera en la escuela Ortolani, de Empalme Graneros, en la que resultó herido un nene de 6 años.
“Queremos que el gobernador, el ministro de Seguridad y el de Educación dejen de hacer comentarios, casi como periodistas, y que tomen cartas en el asunto”, sostuvo y consideró que la dirigencia política “está muy preocupada por las elecciones”.
Por su parte, el titular de Sadop, Martín Lucero, sentenció: “La inseguridad atraviesa a toda la ciudad, no distingue entre barrios, ni clases sociales, menos entre escuelas públicas y privadas”.
En ese sentido, se refirió a tres episodios ocurridos la semana pasada: la segunda amenaza contra el establecimiento de barrio las Flores Nuestra Señora de Itatí, un amedrentamiento en un colegio de zona oeste por parte de un grupo de personas que hasta escupieron desde afuera a docentes y el robo una mamá que estaba guardando la mochila de su hijo en su auto en Fisherton.
“Tiene que haber un poco de empatía de parte del poder político”, exclamó y pidió también la intervención del poder judicial. “Hasta ahora lo único que escuchamos son políticos en campaña. Tiene que haber políticas públicas peor también leyes y para eso tiene que haber jueces que no estén comprometidos con el narcotráfico”.
Por último, Lucero expresó: “Estamos planteando vivir normalmente, que cuando los chicos vayan la escuela no le peguen un tiro. Para eso están los funcionarios públicos, para que la gente evite ese tipo de padecimientos”.