En la mañana de hoy, miércoles 3, el Concejo Municipal de Rosario realizó en su recinto de sesiones la audiencia pública para analizar la situación ambiental del Arroyo Ludueña, promovida desde la comisión de Ecología y Ambiente.
Presidió la actividad, la presidenta del Concejo Municipal, María Eugenia Schmuck, a quien acompañaron en el estrado los ediles Julián Ferrero, de Ciudad Futura; y Mariano Roca, de Arriba Rosario, presidente y vicepresidente respectivamente de la referida comisión.
Al inicio, Schmuck abrió formalmente la jornada, saludó a los presentes, y celebró la realización de la audiencia. Recordó la titular del Concejo que «la idea surgió de varios sectores que se alarmaron por la cantidad de residuos y desechos que flotan en el Ludueña». Indicó que «la idea es que los presentes planteen un diagnóstico común respecto a la situación” y que la presencia de los concejales «más que de protagonistas, es de observadores». Y precisó: «Estamos para escuchar lo que piensan y tienen para aportar los interesados en la temática. Ya lo hicimos con la audiencia pública donde analizamos la Regulación de Eventos y Diversión Publica»
Luego fue el turno del moderador, quien explicó la modalidad de las exposiciones y los tiempos habilitados, fijados en 5 minutos para cada orador.
El concejal y presidente de la comisión de Ecología y Ambiente, Julián Ferrero, de Ciudad Futura, agradeció en particular a los vecinos, vecinas, y militantes de organizaciones socio ambientales de la región, provenientes de Funes, Pérez, Zavalla, Ibarlucea, Pujato, entre otras, que forman parte de la cuenca del Arroyo Ludueña.
“Para nosotros es una jornada histórica; es la instancia más importante de la historia del Arroyo Ludueña, asumamos esto con responsabilidad”, indicó el presidente de la comisión de Ecología y Ambiente del Concejo Municipal.
Consideró que “la jornada tiene que marcar un punto de inflexión”; y aseguró que con esta jornada se está iniciando ese proceso. “Necesitamos debatir, y para eso está la audiencia pública. Necesitamos la construcción de un plan serio, del que participen Estado, vecinos, funcionarios, y organizaciones”.
Opinó que solo de esa forma se podrá generar una solución urgente, de largo plazo, para la cuenca del Arroyo Ludueña que viene atraviesa un estado de contaminación y deterioro profundo.
“Expectante que en el día de hoy podamos iniciar un nuevo proceso”, marcó.
Mariano Roca, concejal de Arriba Rosario y vicepresidente de la comisión de Ecología y Ambiente del Concejo Municipal destacó la “importancia del momento, la importancia del lugar, la escucha activa de la problemática que nos convoca en el día de hoy”.
Pidió reflejar la presencia de todos, la importancia de la escucha, la oportunidad del punto de partida, la construcción de una política pública común sobre una temática que nos convoca a todos.
“Desde el oficialismo local vamos a aportar lo que sea necesario. No hay excusas, no hay responsabilidades diseminadas”, finalizó.
Nicolás Biolatto, del Programa Espuma, contó que se trata de un programa autogestivo, de recuperación de aceite de cocina usado (ACU).
Se trata de una Cooperativa de Trabajo compuesta por personas en situación de vulnerabilidad con el propósito de contribuir a su independencia económica, mediante la conversión de este residuo en jabones y otros productos biodegradables.
Contó que desde la organización, y por intermedio de la recolección del ACU, contribuyen a la sostenibilidad ambiental, con prácticas domésticas responsables.
Ratificó que el Arroyo Ludueña enfrenta una grave situación ambiental, producida en parte por la situación lineal de consumo, la ausencia de medidas de prevención, el vertido de aceites, que afecta al agua y su biodiversidad.
“Nuestro trabajo es evitar que el aceite llegue a los arroyos, ríos y suelos. 1 litro impacta en 1000 litros de agua”, graficó.
Cuestionó el uso de detergentes, con su efecto devastador en el agua, y como fuente de contaminación. “Falta un sistema de trazabilidad que debe ser abordado”, agregó.
“La situación del Arroyo Ludueña nos llama a la acción, a adoptar un enfoque preventivo, que no solo mejore la calidad del agua sino que incluya mayor cantidad de actores en el proceso”, concluyó.
Jorge Bartoli, de la organización El Paraná no se toca, recordó la crisis del ecocidio del 2020 con incendios y bajante en el río Paraná. “En ese momento cosechamos los frutos de haber sembrado el olvido, la desidia y el desinterés durante décadas. Hoy, lamentamos trasladar las mismas palabras al Arroyo Ludueña y su cuenca”.
Denunció que sectores se han aprovechado de esa situación con la connivencia de autoridades.
Opinó que el Arroyo Ludueña refleja el avance sin normas, expone los desechos cloacales, la basura por doquier, una autopista emblemática, y contexto social dramático, entre otros.. “El Arroyo Ludueña derrama sus penurias en el río Paraná que diluye sus miserias”, puntualizó.
Sugirió el llamado a un Comité que aborde la particularidad de esta enorme cuenca de 800 KM2, equivalente a 4,5 veces más grande que Rosario, bajo responsabilidad de funcionarios de la provincia de Santa Fe; y reclamó por la ley de humedales.
“No nos esperen para aplaudir absurdos Sabalitos Barredores, pero sí para un proyecto serio, socioambiental del Arroyo”, finalizó.
Mía Oliva, estudiante del Colegio Bernardino Rivadavia, aludió a la toma de conciencia sobre la contaminación de las aguas, los desagües cloacales que no están habilitados, los residuos sólidos arrojados en el arroyo.
“Como ciudadana siento gran responsabilidad sobre las generaciones presentes”, expresó.
“Vengo a pedir que implementen medidas más estrictas y efectivas, limpiezas periódicas y monitoreo, educar, concientizar, un drenaje adecuado, y control para garantizar objetivos”.
Precisó que el valor de los bienes depende, no de su utilidad, sino de su escasez; instó al cuidado de los suelos y el agua como recursos no comercializables. “Juntos podemos devolver al Arroyo Ludueña un entorno saludable para todos”, finalizó.
Franco Peruggino, ambientalista y voluntario de Mundo Aparte, mostró las imágenes de animales silvestres y especies de la fauna a los que llamó “vecinos” en fotos expuestas en pantalla. Sugirió que se incluya en el lugar cartelería sobre los animales que pueden encontrarse junto a la cuenca; reclamó por mayor toma de conciencia y difundir recomendaciones para evitar la contaminación del Arroyo.
“Debemos sanearlo, luego hay que educar para que no se vuelva a ensuciar. Hay barrios que tienen el arroyo como basural. La idea de armar un comité de cuenca sería importante, hay que incluir a los demás municipios, no podemos verlo como un problema solamente de Rosario”, indicó.
Sobre el final reclamó por la ordenanza de arbolado, y la protección de las especies; y advirtió por los residuos de pesca.
Entre otros participaron del encuentro los concejales y concejalas: Juan Monteverde, de Ciudad Futura; Norma López, y Mariano Romero, de Justicia Social; Julia Eva Irigoitia y Lisandro Cavatorta, del bloque Justicialista; Mariano Roca y Fabrizio Fiatti, de Arriba Rosario; Alicia Pino y Verónica Irizar, de la bancada Socialista; María Fernanda Gigliani, de Iniciativa Popular; Ana Laura Martínez, del Pro; Hernán Calatayud y Marisol Bracco, de Volver a Rosario, y la ex edila María Luz Ferradas.