18.7 C
Rosario
jueves 21 noviembre 2024
spot_img

Moto G9 Power: Un celular de gama media que apuesta todas sus fichas a la autonomía y al precio

El teléfono es más grande que su antecesor, aunque su pantalla es de menor resolución; pero sale ganando en dos aspectos claves

Cuando el nombre de un celular incluye el término power, casi siempre hace referencia a su autonomía, y no a la potencia de su procesador o la cantidad de memoria RAM. Este es el caso del Moto G9 Power que probamos esta semana, cuya batería es de 6000 mAh, cifra que aventaja a la de muchos de los smartphones de alta gama. Esto se traduce en cerca de dos días y medio sin pasar por un enchufe.

El equipo propone un salto respecto a su antecedente inmediato, el G8 Power, con una pantalla más grande (aunque la resolución es menor) y una batería de 1000 mAh adicionales. Pero como es habitual en esta línea de Motorola la ficha técnica es más modesta que las de sus compañeros de serie. La ecuación es la siguiente: gran autonomía con desempeño de gama media, lo que resulta en un precio accesible.

Por contrapartida, aquellos que están acostumbrados a procesadores premium y mucha RAM sentirán que la experiencia queda corta. En todo caso, ninguna evaluación será justa si no se considera la relación entre el precio y las especificaciones. En este caso, el sugerido por la marca es 36.999 pesos.

Mucha batería, ¿y después?

Naturalmente hay más ítems en la ficha técnica. La pantalla es de 6,8″ con una resolución de 1640 x 720 pixeles, y la cámara delantera aparece en un pequeño orificio ubicado hacia la izquierda, que roba poquísimos milímetros al display. Para profundizar el diseño pura pantalla, el lector de huellas se encuentra en la cara posterior.

El celular es un poco más grueso que la media (9,7 mm), lo que se explica por la robustez de su batería. En sus especificaciones encontramos elementos de un gama media y eso se replica en la experiencia de uso. Viene con Android 10 y un procesador Qualcomm Snapdragon 662 con 4 GB de RAM, más 128 GB de almacenamiento, que pueden expandirse con una tarjeta microSD. No ofrece el desempeño de un teléfono insignia, pero todo marcha bien en tareas habituales, como navegación, redes sociales y otras apps, multitarea, e incluso algunos juegos.

Cuando el nombre de un celular incluye el término power, casi siempre hace referencia a su autonomía, y no a la potencia de su procesador o la cantidad de memoria RAM. Este es el caso del Moto G9 Power que probamos esta semana, cuya batería es de 6000 mAh, cifra que aventaja a la de muchos de los smartphones de alta gama. Esto se traduce en cerca de dos días y medio sin pasar por un enchufe.

El equipo propone un salto respecto a su antecedente inmediato, el G8 Power, con una pantalla más grande (aunque la resolución es menor) y una batería de 1000 mAh adicionales. Pero como es habitual en esta línea de Motorola la ficha técnica es más modesta que las de sus compañeros de serie. La ecuación es la siguiente: gran autonomía con desempeño de gama media, lo que resulta en un precio accesible.

Por contrapartida, aquellos que están acostumbrados a procesadores premium y mucha RAM sentirán que la experiencia queda corta. En todo caso, ninguna evaluación será justa si no se considera la relación entre el precio y las especificaciones. En este caso, el sugerido por la marca es 36.999 pesos.

Mucha batería, ¿y después?

Naturalmente hay más ítems en la ficha técnica. La pantalla es de 6,8″ con una resolución de 1640 x 720 pixeles, y la cámara delantera aparece en un pequeño orificio ubicado hacia la izquierda, que roba poquísimos milímetros al display. Para profundizar el diseño pura pantalla, el lector de huellas se encuentra en la cara posterior.

El celular es un poco más grueso que la media (9,7 mm), lo que se explica por la robustez de su batería. En sus especificaciones encontramos elementos de un gama media y eso se replica en la experiencia de uso. Viene con Android 10 y un procesador Qualcomm Snapdragon 662 con 4 GB de RAM, más 128 GB de almacenamiento, que pueden expandirse con una tarjeta microSD. No ofrece el desempeño de un teléfono insignia, pero todo marcha bien en tareas habituales, como navegación, redes sociales y otras apps, multitarea, e incluso algunos juegos.

En el terreno fotográfico hay algunos recortes. Una vez más, la intención es ofrecer un celular con mucha autonomía a un precio relativamente accesible. Por eso, como es habitual, la sangría se evidencia en las cámaras. En este caso encontramos un sistema triple en la espalda (se encuentra en un módulo cuadrado similar al que tienen los iPhone 12, por mencionar un ejemplo, con el flash como cuarto elemento) compuesto por una cámara principal de 64 megapixeles (MP) con enfoque automático, una macro de 2 MP y un sensor de profundidad, también de 2 MP. La cámara delantera es de 16 MP. Los resultados son dignos, aunque no podemos compararlos con aquello que ofrecen los teléfonos más avanzados.

Algunos detalles adicionales en el equipo: se mantiene el conector para auriculares tradicional de 3,5 milímetros (hoy ausente en varios móviles), incluye un puerto USB-C (reversible), igual que la mayoría de los smartphones contemporáneos, y tiene un botón físico en el lateral dedicado a activar el Google Assistant.

A fin de cuentas, el Moto G9 Power es un producto sincero. Sus virtudes están a la vista, igual que los elementos que el fabricante ha decidido recortar en favor de mantenerlo accesible para el bolsillo. Eso sí, los compradores desprevenidos deberán saber a qué se refiere exactamente el término Power en la denominación del equipo.

⠀Leé también⠀

⠀Lo último⠀