El “Observatorio MuMaLá, Mujeres, Disidencias, Derechos” presenta el informe “Violencia On-Line contra Mujeres e Identidades Feminizadas”, evidenciando que las redes sociales y TICs son otros ámbitos donde las mujeres, adolescentes y jóvenes, también somos acosadas y violentadas.
El informe fue realizado a partir de una encuesta cuantitativa realizada a 836 adolescentes, mujeres e identidades feminizadas de 17 provincias y CABA. El objetivo de esta experiencia es visibilizar, que, contrario a lo que se cree, el acoso sufrido en las calles se replica también en este ámbito a través del ciberacoso sexual o acoso sexual virtual. Al mismo tiempo, exigir al Estado que incorpore políticas públicas específicas incluyéndolas en el Plan de Erradicación de Violencia hacia las Mujeres e Identidades Feminizadas (IF).
Del informe surge que:
Las más afectadas por la violencia on-line son las jóvenes entre 15 y 19 años.
Que la edad de inicio en la cual se comienza a padecer la violencia on-line es a los 9 años, con un pico de frecuencia a los 14 años de edad.
Que el el 58% de las encuestadas recibieron comentarios sexuales no deseados, no consentidos a través de internet.
También, que el 62% de las encuestadas recibió fotos o videos con contenido sexual de otras personas sin solicitarlo.
En cuanto al delito de grooming o contacto con desconocidos, el 65% de las encuestadas refirió que algún adulto desconocido trató de contactarse con ellas a través de las redes.
Sin embargo, el 83% no se asesoró frente a estas situaciones. Quienes decidieron no denunciar fue por no considerarlo importante (35%), por falta de información (27%) o por miedo o vergüenza (15%). En el caso de haber denunciado o pedido ayuda, la mayoría de las adolescentes lo hicieron en sus escuelas o ámbitos educativos.
“Entendemos que hace falta una mirada integral y con perspectiva de género por parte del Estado al momento de abordar el tema, más en estos días donde lamentablemente vemos a les adolescentes siendo foco de violencias. Es ahí donde exigimos trabajar la prevención en la escuela y en los hogares a través de la aplicación de la Educación Sexual Integral (Ley Nacional 26150)”, remarcaron desde Mumalá.